
El amblipigio (Amblypygi, del griego amblys, «frágil» o «débil» y pygé, «ancas» o «patas») es un orden de arácnidos compuesto por unas 136 especies,[1] típicamente tropicales, de América, África y Asia, y con dos especies (Charinus ionnaticus Kritscher, 1959, y Sarax mediterraneus Delle Cave, 1986) en Grecia (islas de Rodas y Kos). Los amblipigidos o amblipigios tienden a reproducirse de inmediato, buscan zonas oscuras y húmedas, por lo que es común encontrarlos en los baños de las casas o sótanos, sin embargo, ni son peligrosos ni representan peligro para el ser humano y no son de importancia médica debido a que no contienen veneno. Son muy tímidos y poco agresivos. Fungen como control biológico de insectos, como cucarachas, por lo que se sugiere no matarlos. La característica más peculiar es la forma del primer par de patas, mucho más largas que las demás y con función táctil.
Reciben distintos nombres comunes según las regiones (guabá, tendarapos, casimpulgas, canclos o cancles, arañas corazón, arañas látigo, arañas estrella, madres de alacrán, alacranes rey, escorpiones sin cola, limpia casas, tenanche, Amaurys, vinagrillos, cancreo, etc.);[2] se les acostumbra a confundir con arañas, causando espanto y repugnancia a la población, que suele considerarlos peligrosos.
Morfología
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Su tamaño oscila entre los 0,4 y los 4,5 cm. El cuerpo está deprimido y es de color castaño; muestra dos regiones diferenciadas, el prosoma y el opistosoma, que están separadas por una estrecha cintura. El prosoma es ancho y aplanado, en forma de escudo, con dos ojos centrales y tres a ambos lados, próximos al margen frontal; algunas especies carecen de ojos. El opistosoma consta de 12 segmentos; el orificio genital se abre en el segundo esternito y está cubierto por un gran opérculo, bajo el cual también desemboca el primer par de órganos respiratorios (filotráqueas), mientras que el segundo par se abre en el tercer esternito.
Los quelíceros son similares los de los araneidos, con un artejo final en forma de uña, pero sin glándula venenosa y con un órgano estridulador en su cara interna. Los pedipalpos son grandes, muy aparentes, y provistos de numerosas espinas, que dan al animal un aspecto temible; el tarso puede plegarse sobre las espinas de la tibia lo que utiliza para cazar sus presas y como mecanismo de defensa. El primer par de patas es extraordinariamente largo (hasta 30 cm), anteniforme, con la tibia y el tarso multiarticulados; su función no es locomotora sino táctil y quimiorreceptora; siempre están dirigidos hacia adelante y hacia los lados y van palpando continuamente el terreno; tienen gran importancia en la localización de las presas, ya que los amblipigios cazan de noche. Los otros tres pares de patas son marchadoras y también considerablemente largas.
Ecología y biología
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Damon diadema.
Detalle del prosoma de
La hembra transporta la puesta (hasta 60 huevos) en la parte ventral del opistosoma. Cuando nacen las crías, trepan al dorso del opistosoma y son transportadas por la madre hasta la primera muda, cuando se dispersan y hacen vida independiente.
Los amblipigios son lucífugos y nocturnos, refugiándose durante el día bajo piedras, en oquedades de las rocas o bajo la corteza de los árboles. Por la noche deambulan en busca de presas (cucarachas, ortópteros, termitas), tanteando continuamente el entorno con sus patas sensoriales; una vez localizada la capturan con los pedipalpos y la perforan con los quelíceros, succionando sus fluidos corporales. Cuando se les molesta se inmovilizan, pero pueden correr muy rápido si se les acosa. Muchas especies viven en cuevas, donde se localizan en las paredes y el techo.
La mayoría de los amblipigios son hidrófilos y pocas especies resisten mucho tiempo en entornos secos; beben agua y probablemente perciben la presencia de agua con algún tipo de seda sensorial.
Filogenia
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Se conocen fósiles de amblipigios desde el Carbonífero superior (hace unos 300 millones de años).[4]
Todos los estudios recientes sobre la filogenia de Arachnida apoyan la monofilia del clado formado por Araneae, Amblypygi, Schizomida y Uropygi. A dicho clado se le ha denominado de diferentes modos (Caulogastra, Megoperculata, Arachnidea), aunque el nombre más usado es el de Tetrapulmonata, que hace referencia a su principal característica común, la presencia de dos pares de filotráqueas (pulmones en libro) (a veces modificadas o reducidas secundariamente); otras sinapomorfías son la presencia de un estrechamiento (pedicelo o cintura) entre prosoma y opistosoma, un estómago succionador postcerebral, y quelíceros en forma de navaja plegable.[5]
Las relaciones de los Amblypygi con los demás Tetrapulmonata aún no están claras. Los análisis de datos morfológicos tienden a acercarlos los Araneidos, en el clado Labellata (cladograma A); los datos moleculares sostienen que los amblipigios estarían más relacionados con Uropigios y Esquizómidos, formando el clado Pedipalpi (cladograma B):
TetrapulmonataLabellata___
Araneae
Amblypygi
Uropygi
Schizomida
ATetrapulmonata
Araneae
Pedipalpi___
Amblypygi
___
Uropygi
Schizomida
B
Taxonomía
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La clasificación de los amblipigios es la siguiente:
- Suborden Euamblypygi
Infraorden CharininaSuperfamilia CharinoideaFamilia Charinidae (51 especies)Infraorden NeoamblypygiSuperfamilia CharontoideaFamilia Charontidae (12 especies)Superfamilia PhrynoideaFamilia Phrynichidae (36 especies)Familia Phrynidae (59 especies)
- Suborden Paleoamblypygi
Superfamilia ParacharontoideaFamilia Paracharontidae (1 especie)
Referencias
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Enlaces externos
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Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Amblypygi.
Wikispecies tiene un artículo sobre Amblypygi.
Existen muchos invertebrados poco conocidos, pero que en el mundo de los conocedores figuran como ejemplares especiales precisamente por ser exóticos o extraños. Unos de estos invertebrados son los amblipigios, parientes de las arañas, que incluso suelen tenerse como mascota en algunos países. Parecieran ser muy peligrosos por tener múltiples patas, un par de quelíceros y látigos más largos que su cuerpo, pero no son amenazantes para el ser humano como pudiera pensarse. Entre los nombres comunes de los amblipigios está vinagrillo, araña látigo, escorpión sin cola o canclo, variando el nombre según el país. Para conocer más sobre estos animales de extraño aspecto, te invitamos a seguir leyendo este artículo de EcologíaVerde sobre qué son los amblipigios, sus características y tipos .
Los amblipigios son un orden de artrópodos arácnidos . Sus características son un cuerpo aplanado y corto, el primer par de patas modificadas en látigos sensoriales muy largos y quelíceros para fragmentar a sus presas. Algunos tipos de amblipigios son Damon diadema (amblipigio gigante), Phrynus marginemaculatus, Acanthophrynus coronatus, Paracharon caecus, Paraphrynus carolynae, Weygoldtina spp.
Los amblipigos son animales invertebrados arácnidos. A pesar de que son parientes cercanos de las arañas, no son arañas y tampoco insectos, como suele clasificarse erróneamente a los arácnidos. Son unos de los representantes más primitivos del grupo de arácnidos, pero también es uno de los grupos menos estudiados en comparación con otros arácnidos.
Revisando la taxonomía de los amblipigios o arañas látigo podemos comprender mejor la clasificación de estos invertebrados. Pertenecen a:
- Filo Arthropoda.
- Subfilo Chelicerata.
- Clase Arachinda.
- Orden Amblypygi, de donde proviene su nombre común que en griego significa «patas débiles».
Por la relación que tienen con las arañas surge una duda, ¿los amblipigios pican? Lo cierto es que carecen de glándulas de veneno, y tampoco tienen estructuras similares a colmillos, así que no son venenosos y no pican. Por tanto, la picadura del amblipigio no es algo que deba temerse. De hecho, por no tener sistema de defensa como otros arácnidos, son muy tímidos y tienden a huir ante las amenazas, prefiriendo esconderse bajo la hojarasca o en cualquier escondite disponible. Ahora, es importante saber que son depredadores con estructuras para estos fines, lo que significa que pueden llegar a causar daños en la piel si llegan a prensar con sus pedipalpos o quelíceros aunque, nuevamente, esto no es frecuente y solamente recurrirán a esto si se les molesta directamente.
Una curiosidad sobre estos extraños animales es que uno aparece en la película de Harry Potter y el cáliz de fuego, así que quizás lo habías visto y no sabías que era un animal que realmente existe.
Te aconsejamos leer estos otros posts sobre Qué son los artrópodos: características, clasificación y ejemplos y los Arácnidos: características, tipos y ejemplos.
La araña que es tan aterradora que tiene su propio «relacionador público»
- Ana Pais
- BBC Mundo (@_anapais)
14 abril 2016
Fuente de la imagen, Cortesia de Kenneth Chapin
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Kenneth Chapin sonríe con un ejemplar de araña látigo en su espalda.
Una araña se posa sobre la espalda de un joven. Sus patas miden más de 20 centímetros y tiene pinzas como si fuera un escorpión. El animal se ve escalofriante.
Pero el joven no muestra miedo ni nerviosismo. Lo que siente al darse vuelta y ver la araña látigo sobre su omóplato es genuina alegría.
Fuente de la imagen, Cortesia de Kenneth Chapin
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Las arañas látigo pueden medir de 5 a 70 cm.
El retrato del biólogo estadounidense Kenneth J. Chapin con una araña látigo en su espalda fue tomada en 2014 en una cueva en Puerto Rico.
Lleva años estudiando estos animales de aspecto violento y aterrador, y asegura que en verdad son seres «delicados y tímidos».
El investigador de 29 años brinda charlas para terminar con el miedo y la desinformación que rodea a las arañas látigo, una combinación que ha llevado a su muerte y hasta exterminio.
Las apariencias engañan
Hay más de 150 especies de Amblypygi, comúnmente llamadas arañas látigo o escorpiones sin cola, pero que no son ni un animal ni el otro. Son amblipigios.
Aunque pueden llegar a medir 70 centímetros en diagonal, estos animales no son peligrosos para el ser humano. De hecho, ni siquiera tienen veneno.
Sin embargo, su mala fama les antecede debido a su tenebroso aspecto.
Fuente de la imagen, Cortesia de Kenneth Chapin
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Se alimentan de cucarachas, grillos, saltamontes, colibríes y lagartijas chicas.
Chapin, por ejemplo, estuvo trabajando en Ecuador, en una región donde habita una comunidad indígena. Allí, la sabiduría popular indica que hay que alejarse de las arañas látigo por ser peligrosas.
«Ni siquiera se ven como si fueran del planeta Tierra», explica este investigador de la Universidad de California, Los Angeles (UCLA). «Parecen como unos locos seres alienígenas grandes y tenebrosos».
El problema de ser tenebroso
México, Brasil y Cuba son los países con mayor diversidad de estos animales que habitan sobre todo entre los trópicos.
Pero para fortuna de aquellos con aracnofobia, es difícil encontrarse con una araña látigo. Tienen hábitos nocturnos, por lo que durante el día suelen esconderse dentro de árboles o cuevas.
Fuente de la imagen, Cortesia de Kenneth Chapin
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Las arañas látigo viven en cuevas, pero también en bosques y desiertos.
Según Chapin, algo destacable de estos arácnidos es que cuidan a los más pequeños. En algunas especies de amblipigios, las madres pueden llegar a cargar con las crías en sus espaldas durante varios meses.
En la cadena alimenticia, sus depredadores son los murciélagos y lagartijas grandes, mientras que ellas se alimentan de cucarachas, grillos, saltamontes, colibríes y lagartijas chicas.
«Los grillos deberían tenerles medio, no los seres humanos», dice Chapin.
Un monstruo en la vida real
Fuente de la imagen, Cortesia de Kenneth Chapin
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El biólogo Chapin considera que las arañas látigo son animales fascinantes.
En la película «Harry Potter y el cáliz de fuego», la reacción de los jóvenes magos ante una araña látigo es la opuesta a la de Chapin. El miedo se apodera de ellos en cuanto sienten al animal sobre sus brazos o rostros. A Ron Weasley, el mejor amigo de Harry, incluso se le desfigura la cara del pánico.
Lo interesante, cuenta Chapin, es que si bien en el libro se describe una araña de ficción, en la película el ejemplar creado digitalmente para la escena fue una araña látigo.
«A pesar de que las películas de ‘Harry Potter’ están llenas de mitología, criaturas y animales que no existen en la naturaleza, en este caso pensaron que usar un animal de verdad era útil para sus objetivos, por tratarse de un ejemplar tan extraño como los monstruos que aparecen en la saga».