
ESCUCHAR
Inminente es un término con origen en el vocablo latino immĭnens que, a su vez, produce de imminēre (“amenazar”). En concreto, podemos determinar que es una palabra que se encuentra conformada por tres elementos latinos:
• El prefijo in-, que se usa para indicar que algo está adentro o que entra.
• El verbo minare, que puede traducirse como “amenazar”.
• El sufijo -nte”, que viene a emplearse como sinónimo de “agente”.
Se trata de un adjetivo que se utiliza para nombrar a aquello que amenaza o que sucederá a la brevedad.
Por ejemplo: “La expertos consideran que la erupción del volcán es inminente”, “Tenemos que ordenar la casa: la llegada de tus padres es inminente”, “El entrenador sabía que la derrota era inminente y que no podía hacer nada para evitarla”.
Ejemplos de inminente
Lo inminente, por lo tanto, es algo que tendrá lugar prontamente. No hay una definición precisa sobre el lapso de tiempo que se considera inminente o pronto, ya que su consideración variará de acuerdo al contexto.
Si un avión comienza a avanzar por la pista, podrá decirse que su despegue será inminente. El hecho de empezar a movilizarse anticipa que ya está todo preparado para que la nave levante vuelo, por lo que el despegue se concretará en los próximos segundos.
Algo inminente también puede tener una concreción más dilatada e, incluso, indefinida. El entrenador de un equipo de fútbol le confiesa a un periodista que presentará su renuncia en las próximas horas. El reportero, por lo tanto, informa que el técnico dejará su club de manera inminente. No se sabe, sin embargo, en qué momento la renuncia se hará efectiva: pueden ser algunas horas o, tal vez, un par de días.
Puede servirte: Avión ligero
El término en el cine y la literatura
Dentro del ámbito del cine se ha utilizado de manera frecuente el término que ahora nos ocupa. Buena muestra de ello es la película “Ejecución inminente”, que fue estrenada en 1999. Clint Eastwood es el director y protagonista de este filme que cuenta cómo un periodista desprestigiado, por su alcoholismo, se entrevista con un hombre que va a ser ejecutado en breve periodo de tiempo.
Esa charla que mantendrán le hace pensar que quizás el condenado es inocente, por lo que inicia una investigación contrarreloj para evitar que muera una persona que no ha tenido nada que ver con los delitos que se le imputan.
Por otro lado, nos topamos con el largometraje “Peligro inminente”, que vio la luz en 1994. Philip Noyce es el cineasta que se puso detrás de las cámaras para llevar a cabo el rodaje de esta historia, protagonizada por Jack Ryan, al que da vida Harrison Ford. Aquel es el subdirector de la CIA y tiene como misión intentar descubrir qué hay detrás del asesinato de unos hombres que eran amigos de uno de los narcotraficantes más importantes. Sin embargo, no lo tendrá nada fácil y su vida estará en serio peligro.
También conoce como “Peligro inminente”, por último, a un libro de la británica Agatha Christie que fue publicado en 1932.
Ver también: Ejecución
Inminente significa: es probable que ocurra en cualquier momento, o cerca. No distante o remoto.
La probabilidad de daño grave significa: un riesgo sustancial de que una persona cause daño físico a sí misma u otra persona, o pérdida o daño sustancial a la propiedad de otra persona. La evidencia de que existe la posibilidad de un daño grave puede incluir:
-
amenazas o intentos de suicidio o daño a sí mismos;
-
comportamiento que ha dañado físicamente a alguien en el pasado, o que hace que una persona razonablemente tema que será lesionado físicamente;
-
comportamiento que ha causado daños sustanciales en el pasado; o
-
una amenaza a la seguridad física de otra persona, si la persona que hace la amenaza tiene antecedentes de uno o más actos violentos.
Puede encontrar definiciones de «aislamiento», «restricción» y «dispositivo de restricción» en el Código Revisado de Washington en RCW 28A.600.485, en línea en: https://app.leg.wa.gov/RCW/default.aspx?cite=28A.600.485.
Puede encontrar definiciones de «inminente» y «probabilidad de daño grave», en el Reglamento de Educación Especial del Estado, en el Código Administrativo de Washington, en WAC 392-172A, en www.leg.wa.gov/LawsAndAgencyRules.
Se dice que algo es inminente cuando está previsto que ocurra de manera inmediata o en un plazo muy breve de tiempo. Así, la palabra inminente es sinónima de próximo, inmediato o cercano.
El adjetivo inminente viene de la palabra en latín imminentis que, a su vez, deriva del verbo imminere, que significa amenazar. El origen de la palabra nos permite recordar que inminente se utiliza con frecuencia en situaciones amenazantes o de cierto peligro.
Peligro inminente
En ocasiones las situaciones de peligro no se presentan de improviso sino que hay ciertas señales que informan sobre ellas. Cuando esto ocurre se habla de un peligro inminente. Esta expresión se utiliza en casos como los siguientes: catástrofes naturales previsibles, amenaza de derrumbamiento de un edificio, tormentas intensas, etc. Cuando el peligro inminente se convierte en una realidad su aparición no es tan sorprendente, ya que una información previa indica que algo grave va a ocurrir.
Desde el punto de vista de la seguridad se intenta evitar la subjetividad al utilizar la expresión de «peligro inminente»
De esta manera, los organismos responsables de la seguridad intentan concretar cuándo resulta adecuado emplear esta expresión. Esta cuestión es esencial para activar los mecanismos de seguridad y los protocolos de actuación correspondientes.
Inminente, un concepto que pone de manifiesto la percepción relativa del tiempo
Tanto desde el punto de vista de la física como desde la óptica de la existencia humana, el tiempo es algo relativo. Un claro ejemplo de ello lo encontramos al analizar la palabra inminente en sus distintos usos. Si se considera que en unos segundos va a ocurrir un accidente, un observador podrá afirmar que sucederá de manera inminente.
Si está previsto que pronto suceda un alud debido al estado de la nieve, también se empleará el adjetivo inminente. Y si nos situamos en el contexto del cambio climático, se dice que es inminente un crecimiento del nivel del mar. Por lo tanto, el calificativo inminente es aplicable en relación a un momento muy próximo en el tiempo (unos segundos), con una proximidad cercana (pronto) o incluso en un tiempo indeterminado (en los próximos años).
En cualquier caso, se alude a situaciones que tienen un componente amenazante y, al mismo tiempo, incierto. Hay que tener en cuenta que es posible prever un peligro pero no es tan factible conocer cuáles son sus consecuencias exactas.
Fotos: iStock – Todor Tsvetkov / ivanastar
Autor: Javier Navarro.
Trabajo publicado en: Jun., 2016.
Datos para citar en modelo APAX
Navarro, J. (junio, 2016). Definición de Inminente. Definición ABC. Desde https://www.definicionabc.com/medio-ambiente/inminente.php
Navarro, J. (junio, 2016). Definición de Inminente. Definición ABC. Desde https://www.definicionabc.com/medio-ambiente/inminente.php
: Javier Navarro.Trabajo publicado en: Jun., 2016.
Pregunta
Respuesta
Pronto es un término relativo. Si estás preparando una comida, pronto podría significar que estará lista en los próximos cinco minutos. Si estás esperando el nacimiento de un bebé, pronto puede suponer cualquier cosa hasta los nueve meses. Así que cuando preguntamos, «¿Jesús viene pronto?» tenemos que puntualizar el significado de pronto.
El mismo Jesús dijo que vendrá pronto: «Aquel que es el testigo fiel de todas esas cosas dice: «¡Sí, yo vengo pronto!» (Apocalipsis 22:20 — NTV). Y luego Juan añade estas palabras: «¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!». El libro de Juan fue escrito hace casi dos mil años, lo que lleva a mucha gente a preguntarse qué quiso decir Jesús con «pronto».
La palabra griega tachu, que se traduce como «pronto» o «rápidamente», significa «sin demoras innecesarias». No significa «inmediatamente». La misma palabra se usa en otros lugares del Nuevo Testamento, pero, curiosamente, es la que Jesús usa con más frecuencia en el libro del Apocalipsis (Apocalipsis 2:16; 3:11; 11:14; 22:7, 12 y 20). El significado de esto parece indicar que se han puesto en marcha los acontecimientos que marcarán el comienzo de Su llegada sin ninguna demora innecesaria. Todo se está desarrollando de acuerdo con el calendario de Dios.
Pedro nos reitera que Dios no se está demorando en lo que respecta a los eventos proféticos. El calendario de Dios es perfecto: «El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento» (2 Pedro 3:9). Desde esta perspectiva, podemos entender que Jesús viene «pronto», pues el plan de Dios avanza y sólo se retrasa para permitir que todos los elegidos se salven (Romanos 8:29; Efesios 1:5) — un aplazamiento necesario.
La Biblia enseña que el regreso de Jesús por Su iglesia es inminente, lo cual significa que el rapto podría ocurrir en cualquier momento. Parece que los apóstoles creían que Jesús volvería mientras ellos estuvieran vivos. Con frecuencia se referían a los «postreros tiempos» (1 Pedro 1:20; 1 Corintios 10:11; Hebreos 1:2) e instaban a los creyentes a estar preparados. Parece que Jesús también tenía la intención de que creyéramos en Su inminente regreso, porque muchas veces instó a Sus seguidores a «estar preparados» (Lucas 12:40; 21:34-36; Marcos 13:33). Puesto que nadie ha sabido o puede predecir exactamente cuándo vendrá nuevamente (ver Mateo 24:36), debemos vivir con la expectativa de que puede venir en cualquier momento. Ese parece ser el punto de vista de Jesús por no ser más específico. Quiere que cada generación viva teniendo en cuenta que el Señor puede aparecer de repente y que tendremos que rendir cuentas sobre la manera en que nos encuentre (Lucas 12:38). Para responder a la pregunta, «¿Jesús vendrá pronto?» decimos, «Sí, vendrá sin demoras innecesarias».
Pronto es un término relativo. Si estás preparando una comida, pronto podría significar que estará lista en los próximos cinco minutos. Si estás esperando el nacimiento de un bebé, pronto puede suponer cualquier cosa hasta los nueve meses. Así que cuando preguntamos, «¿Jesús viene pronto?» tenemos que puntualizar el significado de pronto.El mismo Jesús dijo que vendrá pronto: «Aquel que es el testigo fiel de todas esas cosas dice: «¡Sí, yo vengo pronto!» (Apocalipsis 22:20 — NTV). Y luego Juan añade estas palabras: «¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!». El libro de Juan fue escrito hace casi dos mil años, lo que lleva a mucha gente a preguntarse qué quiso decir Jesús con «pronto».La palabra griega tachu, que se traduce como «pronto» o «rápidamente», significa «sin demoras innecesarias». No significa «inmediatamente». La misma palabra se usa en otros lugares del Nuevo Testamento, pero, curiosamente, es la que Jesús usa con más frecuencia en el libro del Apocalipsis (Apocalipsis 2:16; 3:11; 11:14; 22:7, 12 y 20). El significado de esto parece indicar que se han puesto en marcha los acontecimientos que marcarán el comienzo de Su llegada sin ninguna demora innecesaria. Todo se está desarrollando de acuerdo con el calendario de Dios.Pedro nos reitera que Dios no se está demorando en lo que respecta a los eventos proféticos. El calendario de Dios es perfecto: «El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento» (2 Pedro 3:9). Desde esta perspectiva, podemos entender que Jesús viene «pronto», pues el plan de Dios avanza y sólo se retrasa para permitir que todos los elegidos se salven (Romanos 8:29; Efesios 1:5) — un aplazamiento necesario.La Biblia enseña que el regreso de Jesús por Su iglesia es inminente, lo cual significa que el rapto podría ocurrir en cualquier momento. Parece que los apóstoles creían que Jesús volvería mientras ellos estuvieran vivos. Con frecuencia se referían a los «postreros tiempos» (1 Pedro 1:20; 1 Corintios 10:11; Hebreos 1:2) e instaban a los creyentes a estar preparados. Parece que Jesús también tenía la intención de que creyéramos en Su inminente regreso, porque muchas veces instó a Sus seguidores a «estar preparados» (Lucas 12:40; 21:34-36; Marcos 13:33). Puesto que nadie ha sabido o puede predecir exactamente cuándo vendrá nuevamente (ver Mateo 24:36), debemos vivir con la expectativa de que puede venir en cualquier momento. Ese parece ser el punto de vista de Jesús por no ser más específico. Quiere que cada generación viva teniendo en cuenta que el Señor puede aparecer de repente y que tendremos que rendir cuentas sobre la manera en que nos encuentre (Lucas 12:38). Para responder a la pregunta, «¿Jesús vendrá pronto?» decimos, «Sí, vendrá sin demoras innecesarias».