
Cuenta la antigua leyenda que la hermosa princesa purépecha Huanita se enamoró perdidamente de Tangáxhuan, quien era sobrino y heredero de Tariácuri, fundador del Imperio Purépecha, que se extendió por el territorio que hoy comprende el estado de Michoacán, así como parte de Jalisco y Guanajuato.
Huanita, en un descuido, fue secuestrada por Candó, un sacerdote sacrílego, quien la mantuvo oculta en una yácata (antigua construcción en forma de pirámide de las culturas prehispánicas de Michoacán) de Cutzé. La princesa lloró tanto su desgracia que formó un lago con sus lágrimas. Por ello, Camécuaro significa “lugar de la amargura oculta”.
Tangáxhuan se enteró del lugar donde tenían aprisionada a Huanita. Emprendió de inmediato el rescate de su amada. Mientras el noble purépecha bajaba por el cerro vio a lo lejos a Candó. Entonces tomó una flecha, tensó su arco y disparó. Aquella saeta atravesó al secuestrador y se clavó en un sabino, el cual se partió y de allí brotó un manantial de agua verde que jamás se seca.
Dicen las personas que se adentran al fondo del lago de Camécuaro, que entre sus aguas suele aparecer la figura de una hermosa mujer que les jala los pies y desea retenerlos con ella por siempre.
NUMERALIA
- 1.6 hectáreas
Extensión del lago de Camécuaro, cuya máxima profundidad son seis metros.
- 1940
Año en que este lago fue nombrado Parque Nacional por el ex presidente Lázaro Cárdenas del Río.
También puedes consultar:
Parque Nacional de Lagos de Camécuaro
https://www.gob.mx/semarnat/articulos/el-08-de-marzo-de-1941-fue-decretado-el-parque-nacional-lagos-de-camecuaro-tangancicuaro-michoacan?idiom=es
Rescatan la música tradicional purépecha
http://www.gob.mx/cultura/prensa/rescatan-a-la-musica-tradicional-purepecha?state=published
Charanda, tradición purépecha
https://www.gob.mx/sagarpa/articulos/charanda-tradicion-purepecha?idiom=es
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El ahuehuete es el árbol nacional mexicano que, gracias a su belleza, esplendor, tamaño y además, ha formado parte de los sucesos históricos del país. Sin duda alguna este árbol es importante para la cultura mexicana y su nombre tiene derivación náhuatl, ahuehuetl, significa “viejo del agua”, y precisamente cuenta con una leyenda reconocida en Michoacán con respecto a los ahuehuetes sobre el agua, en el famoso Lago de Camécuaro.
De acuerdo con la leyenda del Lago de Camécuaro, Michoacán, aquí se vieron increíbles ahuehuetes sobre el agua, algo sorprendente porque la profundidad del lago es de seis metros. Aquí te vamos a revelar más de esta leyenda y todo lo que puedes hacer en el parque nacional declarado por el presidente Lázaro Cárdenas en 1940.
¿Cuál es la leyenda del Lago de Camécuaro y los ahuehuetes sobre el agua?
La leyenda del Lago de Camécuaro menciona que había una hermosa princesa purépecha llamada Huanita, ella se enamoró perdidamente de Tangáxhuan, quien era sobrino y heredero de Tariácuri, fundador del Imperio Purépecha, lo que se extendió por el territorio que hoy comprende el estado de Michoacán, así como parte de Jalisco y Guanajuato.
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En un descuido, Huanita fue secuestrada por Candó, un sacerdote sacrílego, quien mantuvo oculta en una yácata. Una antigua construcción en forma de pirámide de las culturas prehispánicas de Michoacán de Cutzé. La princesa lloró tanto su desgracia que formó un lago con sus lágrimas, por eso Camécuaro significa ‘lugar de la amargura oculta’.
Tangáxhuan se enteró del lugar donde tenían aprisionada a Huanita, por lo que emprendió un viaje para rescatarla. Mientras el noble purépecha bajaba por el cerro vio a lo lejos a Candó. Al mismo tiempo tomó una flecha, tensó su arco y disparó. La saeta atravesó al secuestrador y se clavó en un sabino, el cual se partió y desde aquí brotó un manantial de agua verde que nunca seca.
De acuerdo con los habitantes, en el fondo del lago de Camécuaro, que entre sus aguas suele aparecer la figura de una mujer que les jala los pies para poder retenerlos con ella para siempre.
Se cuenta una trágica historia de amor entre la princesa purépecha Huanita y Tangáxhuan, sobrino y heredero de Tariácuri, fundador del Imperio Purépecha. La leyenda dice que la princesa fue secuestrada por un sacerdote sacrílego llamado Candó, quien la mantuvo oculta en una yácata de Cutzé. Huanita lloró tanto, que con sus lágrimas formó el lago de Camécuaro que significa “lugar de la amargura oculta”.
Cuando Tangáxhuan fue a rescatar a su princesa, en su camino vio a lo lejos a Candó; entonces tomó su arco y le disparó una flecha certera que atravesó al sacerdote y se clavó en un sabino, este se partió y de allí brotó un manantial de agua verde.
La historia de este amor embellece y adorna aún al Parque Nacional Lago de Camécuaro, un lago natural que está formado por nacimientos de agua que borbotean de entre las raíces de los árboles. Rodeado de una profusa vegetación que se reflejan en sus aguas cristalinas, el Lago de Camécuaro llama la atención de todos los que aprecian la naturaleza, así como de fotógrafos que quieren captar su belleza a través de la lente.
En 1941 el entonces presidente Lázaro Cárdenas lo decretó como Parque Nacional Lago de Camécuaro con el fin de proteger la flora y la fauna, además de estar ligado con las tradiciones tarascas. Quien visita el parque tiene la opción de acampar, dar un paseo en lancha, caminar por los alrededores y hasta nadar en albercas de aguas termales. Hay quien se aventura a bucear motivados por la leyenda que acompaña al lago de Camécuaro, ya que se cuenta que en el fondo aparece la figura de Huanita que les jala los pies y desea retenerlos.
El Parque Nacional Lago de Camécuaro es uno de esos lugares que se deben visitar en el Estado de Michoacán. Se encuentra en las afueras de la Ciudad de Tangancícuaro de Arista, a tan solo 13 kilómetros al sureste de Zamora.
El Lago de Camécuaro tiene una extensión de 1,400 metros de largo, 100 metros de ancho y seis metros de profundidad máxima. Se formó por los diferentes nacimientos de agua cercanos y debido a lo cristalino de sus aguas, en él puedes realizar actividades como el buceo y natación.
El Lago de Camécuaro fue nombrado Parque Nacional en 1940 y se le considera un Área Natural Protegida. La finalidad del nombramiento, realizado por el entonces presidente Lázaro Cárdenas, fue el de garantizar la protección de su fauna y flora.
El lago se ubica en Tangancícuaro de Arista, entre las ciudades de Morelia y Guadalajara. Para llegar desde cualquiera de estas, debes tomar la Carretera Federal 15 rumbo a este municipio. La distancia de Morelia al lago es de 195 kilómetros y desde Guadalajara, 177 kilómetros.
Si vas en autobús, debes llegar a la terminal de Zamora y de ahí tomar otro autobús hacia Tangancícuaro. Puedes pedirle al conductor que te indique dónde debes bajar para ir al lago y, desde donde te deje, caminarás alrededor de 700 metros hasta la entrada al parque.
Lago de Camécuaro, el lago de lágrimas
Como muchos lugares en México, este esconde una gran historia.
Cuenta la leyenda que una princesa de nombre Huanita estaba perdidamente enamorada de Tangáxhuan, sobrino y heredero de Tariácuri, fundador del Imperio Purépecha. Lamentablemente, la princesa fue secuestrada por un sacerdote de nombre Candó, quien la mantenía encerrada en una yácata (edificación antigua de la época prehispánica), donde Huanita lloraba día y noche. Fue tan inmensa su tristeza y llanto que sus lágrimas formaron el Lago de Camécuaro, al que también se le conoce como “lago de lágrimas” o “lugar de la amargura oculta”.
Sin embargo, Tangáxhuan decidió ir a rescatarla y mientras bajaba un cerro se topó con el sacerdote. Sin pensarlo, le lanzó una flecha que dejó a Candó clavado en un sabino. Desde ese entonces, se dice que nació un manantial de agua color verde esmeralda.
Los lugareños que se adentran al Lago de Camécuaro también cuentan que, en sus profundidades, han visto a una hermosa mujer que intenta sujetarles las piernas, pues desea retenerlos a su lado para siempre.
Qué hacer en el Lago de Camécuaro
No te puedes ir sin nadar en el lago, porque lo cristalino de sus aguas te dará la confianza suficiente para sumergirte de inmediato.
En caso de que busques más aventura, aquí cuentan con una plataforma y un mecate para tirarte al más puro estilo de Tarzán.
Si no sabes nadar no tienes de qué preocuparte, ya que existen varias zonas con diferentes profundidades. Al inicio del parque encontrarás pequeñas albercas naturales de poca profundidad. O puedes recorrer el lago en un bote, con capacidad para 6 personas, cuyo trayecto dura 40 minutos.
También podrás quedarte a acampar. El lugar tiene zonas especiales para hacer camping en compañía de tu pareja, familia o amigos. El cielo, oscuro y estrellado, te arrullará al mismo tiempo que los sonidos del bosque.
Ciclismo, senderismo y más
Además, si deseas recorrer el parque de una manera original y dinámica, puedes rentar una cuatribici y vivir esta increíble aventura.
El misticismo de este lugar va más allá de sus aguas turquesas, pues los ahuehuetes, designado como el Árbol Nacional en 1921, parecen firmes custodios que le dan un aura más solemne y especial al sitio.
Los diversos paisajes que te brinda el Lago de Camécuaro son ideales para una selfie perfecta, así que no olvides retratar tu visita en este bello paisaje.
Puedes llevar comida o comprar en los diferentes establecimientos que se encuentran alrededor y degustar delicias michoacanas mientras sigues en contacto con la naturaleza y disfrutas de la fauna y flora del lugar, la cual debes respetar.
Gastronomía michoacana
Nocabe duda de que la gastronomía michoacana alberga recetas y fusiones de alimentos, sabores y texturas que la hacen destacar en México. Además, es de las más antiguas de nuestro país. Por todo esto, fue catalogada Patrimonio Intangible de la Humanidad en 2010 por la Unesco.
No te puedes ir del lago sin probar los chongos zamoranos. Los venden en el Parque Nacional o en dulcerías en Zamora. Estamos seguros de que te encantarán, así como las corundas, carnitas de Quiroga, gazpachos y más platillos.
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La iglesia más alta de México
A tan sólo 20 minutos del lago se ubica Zamora, una ciudad en la que se encuentra la iglesia más alta y majestuosa de México: el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe o Santuario Guadalupano, de estilo gótico. Sus torres miden 107 metros de altura, dándole un inigualable toque de magnificencia.
Durante mucho tiempo se le conoció como la “catedral inconclusa”, debido a que su construcción se suspendió en el periodo de la Revolución Mexicana.
Fue hasta 2008 cuando finalmente terminaron toda la obra y quedó bastante similar a la Catedral de San Patricio, en Nueva York, Estados Unidos.